Leche de almendras casera: cómo hacerla de manera fácil
La leche de almendras es una de las opciones más populares para aquellos que buscan una alternativa a la leche de vaca. No solo es una opción saludable, sino que también es fácil y económica de hacer en casa. En este artículo te enseñaremos cómo hacer tu propia leche de almendras casera en solo unos simples pasos, así como los beneficios y consejos adicionales para que puedas disfrutar de esta deliciosa bebida.
Beneficios de la leche de almendras
La leche de almendras es una excelente alternativa para aquellos que son intolerantes a la lactosa o que siguen una dieta vegana. Además, es rica en nutrientes esenciales como calcio, vitamina E y proteínas vegetales. También es baja en calorías y grasas saturadas, lo que la hace ideal para aquellos que quieren cuidar su salud.
Pasos para hacer leche de almendras casera
Hacer leche de almendras casera es muy sencillo y solo necesitarás unos pocos ingredientes y utensilios que seguramente ya tienes en casa. A continuación, te presentamos los pasos que deberás seguir para hacer tu propia leche de almendras casera:
Paso 1: Remojar las almendras
Comienza por remojar 1 taza de almendras crudas en agua durante toda la noche. El remojo no solo ablandará las almendras, sino que también eliminará los inhibidores de enzimas y los fitatos que pueden dificultar la digestión.
Paso 2: Licuar las almendras
Una vez que las almendras hayan sido remojadas y enjuagadas, colócalas en la licuadora junto con 4 tazas de agua. Licúa durante unos minutos hasta que las almendras se hayan triturado completamente. Si deseas una leche más espesa, puedes agregar menos agua.
Paso 3: Colar la mezcla
Cuela la mezcla a través de un colador de malla fina o una tela de queso para separar la pulpa de la leche. Si usas un colador de malla fina, asegúrate de presionar la mezcla con una cuchara para obtener la mayor cantidad de leche posible. Si utilizas una tela de queso, debes exprimir la pulpa para asegurarte de que obtienes todo el líquido de la leche.
Paso 4: Refrigerar la leche
Vierte la leche en una jarra o botella y refrigera. La leche de almendras casera se mantendrá fresca en el refrigerador por 3-4 días.
Consejos adicionales
- Si deseas endulzar tu leche de almendras, puedes agregar dátiles, miel o jarabe de arce a la mezcla antes de licuar. Si quieres una leche de almendras con sabor, puedes agregar canela, vainilla o cacao en polvo a la mezcla antes de licuar.
- La pulpa de almendra sobrante es muy versátil y puede ser utilizada para hacer harina de almendra, queso vegano o incluso galletas.
Por qué hacer leche de almendras casera es mejor que comprarla
Hacer tu propia leche de almendras casera es mucho más saludable que comprarla en una tienda. Muchas marcas comerciales contienen aditivos, conservantes y azúcares añadidos que no son buenos para nuestro cuerpo. Además, la leche de almendras casera es más fresca y natural, lo que la hace más sabrosa y nutritiva.
Otras alternativas a la leche de vaca
Si estás buscando más alternativas a la leche de vaca, hay muchas opciones disponibles en el mercado. La leche de soja, la leche de avena y la leche de arroz son solo algunas de las opciones populares. También puedes probar la leche de coco o la leche de cáñamo para una opción más cremosa.
En conclusión, hacer leche de almendras casera es fácil, económico y saludable. Además, es una excelente alternativa para aquellos que son intolerantes a la lactosa o que siguen una dieta vegana. Ahora que sabes cómo hacerla, ¡pruébala en tus recetas favoritas y disfruta de su sabor y nutrientes!
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