¿Cómo lavar los zapatos en la lavadora sin dañarlos?
Después de una fiesta, un largo paseo o hacer deporte, nuestros zapatos pueden quedar llenos de manchas y suciedad persistentes. Y, por supuesto, pueden surgir olores desagradables, especialmente cuando se trata de nuestro par favorito. ¿Por qué no meterlos en la lavadora para que queden limpios? Hay muchas cosas inusuales que se pueden meter en la lavadora, y los zapatos no son una excepción. Esto te permite renovarlos y darles un nuevo aspecto sin tener que pasar horas restregando. Sin embargo, para mantenerlos en buen estado y evitar que se dañen o incluso se encojan, hay que tomar algunas precauciones.
Pasos para lavar los zapatos en la lavadora sin dañarlos
Revisa el material de los zapatos antes de ponerlos en la lavadora
Por desgracia, no todos los zapatos pueden meterse en la lavadora. Sus zapatos de tacón no son compatibles con este método de limpieza. Las botas y botines de gamuza, cuero, seda o satén no deben lavarse en la lavadora, ya que pueden no resistir. Ten en cuenta también que las suelas de corcho pueden agrietarse o deteriorarse debido a la rotación y la humedad. Por otro lado, no olvides colocar tus zapatillas de lona con suela de goma.
Prepara los zapatos para la lavadora
Recuerda siempre quitar los cordones y las suelas antes de meter los zapatos en la lavadora. También puedes considerar la posibilidad de lavar los cordones por separado en un recipiente con agua caliente y detergente. Para dar brillo a los cordones, puedes utilizar zumo de limón o bicarbonato de sodio, que no sólo blanquean los cordones sino que también aflojan y desodorizan las fibras.
- Realiza una limpieza general
No se te ocurriría pasar un trapeador por el suelo sin antes barrer o aspirar, ¿verdad? Bueno, aquí es un poco así. Antes de meter los zapatos en la lavadora, raspa el barro y toda la suciedad posible con un cepillo y quita los chicles. Esto optimizará el lavado en la lavadora y garantizará una limpieza perfecta.
Llena la lavadora
Para evitar dañar sus zapatos o el tambor de la lavadora, no pongas sólo un par. Lo mejor es envolver los zapatos en una delicada malla o funda de almohada. Luego agrega algunas toallas grandes o ropa gruesa para terminar de llenar el tambor. Esto amortiguará los zapatos y los mantendrá bien sujetos.
Programa correctamente la lavadora para un lavado óptimo del calzado
Un programa demasiado caliente puede dañar permanentemente tus zapatos. Si el ciclo de centrifugado es demasiado fuerte, los zapatos pueden encogerse y volverse menos cómodos. Por lo tanto, asegúrate de programar el lavado a 30°C con un centrifugado ligero (entre 400 y 800 rpm, ¡no más!).
Una vez realizada la limpieza, puedes utilizar la secadora, eligiendo siempre un programa suave y adecuado. Si no, bastará con el secado al aire. Para ello, coloca papel de periódico en cada zapato para absorber la humedad y acelerar el proceso de secado. Puedes cambiarlo cuando esté demasiado húmedo. Además, coloca tus zapatos en un rincón alejado de la luz solar directa para evitar el riesgo de que se decolore la parte textil del zapato.
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