Estilo de vida

Los 5 hábitos diarios que debes evitar para prevenir el estreñimiento

Adoptar un estilo de vida saludable puede ayudarte a mantener un sistema digestivo en óptimas condiciones

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El estreñimiento es una condición digestiva común que se caracteriza por tener evacuaciones intestinales poco frecuentes o difíciles. Esto se debe a la lentitud del tránsito intestinal, lo que hace que las heces se endurezcan y se acumulen en el colon. Algunas personas pueden experimentar estreñimiento de forma ocasional, mientras que otras pueden sufrir de este problema de manera crónica.

No solo es incómodo, sino que también puede tener un impacto negativo en la salud. Algunos de los riesgos asociados con el estreñimiento incluyen: dolor abdominal y malestar, formación de hemorroides, fisuras anales, impactación fecal, incontinencia y problemas de salud a largo plazo, como diverticulitis o cáncer de colon

Por lo tanto, es importante abordar el estreñimiento de manera oportuna y adoptar hábitos saludables para prevenir su aparición.

Hábitos diarios que pueden causar estreñimiento

Falta de actividad física

La actividad física regular es fundamental para mantener un sistema digestivo saludable. El ejercicio ayuda a estimular el movimiento intestinal y a mejorar la función del colon. Una vida sedentaria, por el contrario, puede ralentizar el tránsito intestinal y favorecer el estreñimiento.

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Foto: Freepik

Dieta baja en fibra

La fibra desempeña un papel crucial en la prevención del estreñimiento. Ayuda a aumentar el volumen de las heces y a facilitar su paso a través del intestino. Una dieta pobre en alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras, legumbres y granos integrales, puede contribuir al desarrollo del estreñimiento.

No beber suficiente agua

El agua es esencial para mantener una buena hidratación y facilitar el tránsito intestinal. Cuando no se bebe suficiente líquido, las heces se pueden volver más duras y difíciles de expulsar, lo que puede llevar al estreñimiento.

Ignorar el impulso de defecar

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Ignorar o retrasar el impulso natural de ir al baño puede causar que las heces se endurezcan y se acumulen en el colon. Es importante responder a la necesidad de evacuar cuando se presenta, en lugar de posponer o reprimir el deseo.

Uso excesivo de laxantes

Si bien los laxantes pueden proporcionar alivio temporal, su uso excesivo y prolongado puede debilitar los músculos intestinales y empeorar el estreñimiento a largo plazo. Esto se debe a que los laxantes pueden interrumpir el funcionamiento natural del sistema digestivo.

Mujer que sufre de dolor en el abdomen. Botella de pastillas y vaso de agua en una mesa / laxantes
Foto: Shutterstock

Consejos para prevenir el estreñimiento

  1. Aumenta tu actividad física: Incorpora al menos 30 minutos de ejercicio moderado, como caminatas o natación a tu rutina diaria.
  2. Consume más alimentos ricos en fibra: Incluye en tu dieta frutas, verduras, legumbres, granos integrales y semillas. Procura aumentar gradualmente la cantidad de fibra para evitar molestias gastrointestinales.
  3. Bebe suficiente agua: Mantén una buena hidratación bebiendo al menos 8 vasos de agua al día.
  4. Responde al impulso de defecar: Cuando sientas la necesidad de ir al baño, no la ignores. Acude al sanitario de manera regular.
  5. Limita el uso de laxantes: Utiliza los laxantes solo bajo supervisión médica y de manera ocasional, no como solución a largo plazo.
  6. Establece una rutina intestinal: Intenta ir al baño a la misma hora todos los días para ayudar a regular el funcionamiento de tu sistema digestivo.
  7. Reduce el estrés: El estrés puede afectar negativamente la función intestinal. Practica técnicas de relajación, como la meditación para mantener la calma.
  8. Consulta a un profesional de la salud: Si el estreñimiento persiste o empeora, no dudes en consultar a tu médico o a un especialista en gastroenterología para recibir un diagnóstico y un tratamiento adecuado.

Si estás luchando contra el estreñimiento, no te preocupes. Puedes tomar medidas para mejorar tu salud intestinal y prevenir futuros problemas. Consulta a tu médico o a un especialista en gastroenterología para obtener asesoramiento personalizado y un plan de tratamiento adecuado a tus necesidades.

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María Vargas Jimenez

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