Colombia

Gobierno encendió las alarmas por fenómeno que ocurrirá en el segundo semestre

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El gobierno colombiano ha encendido las alertas ante la inminente llegada de un escenario climático sin precedentes durante la segunda mitad del 2024. Según las predicciones, el país se enfrentará a una combinación única de fenómenos climáticos que incluyen lluvias intensas en algunas regiones y sequías severas en otras. Esta situación inédita, que recuerda a los efectos devastadores de La Niña 2010-2011, ha puesto a las autoridades en estado de máxima preparación.

De acuerdo con los expertos, Colombia se encuentra actualmente en una fase de transición entre el fenómeno de El Niño y la inminente llegada del fenómeno de La Niña. Este cambio abrupto en las condiciones oceánicas y atmosféricas generará una variabilidad climática significativa en el país durante los próximos meses.

Pronóstico para julio-agosto-septiembre

Plaza de la República en el centro de Sao Paulo / lluvias en Brasil fenómeno de El Niño - clima en marzo / temporada de lluvias / Dubái
Foto: Shutterstock

Las proyecciones indican que existe una probabilidad del 69% de que se presente La Niña durante el trimestre de julio-agosto-septiembre. Este fenómeno tendrá un impacto diferenciado en las distintas regiones del país:

  • La mitad norte, incluyendo las regiones Pacífica, Caribe y Andina, experimentará lluvias por encima de lo normal.
  • En contraste, las zonas del sur, como la Orinoquía y la Amazonía, registrarán déficits de precipitaciones.

Esta dinámica climática tendrá serias repercusiones en los sistemas hídricos del país. Por ejemplo, el embalse de Chingaza, que abastece de agua a Bogotá, mantendrá su déficit durante todo el año debido a la sequía proyectada en la Orinoquía.

Ante este panorama, el gobierno ha hecho un llamado urgente a los gobiernos locales y a los encargados de la gestión del riesgo para que tomen medidas inmediatas y contundentes.

Instrucciones a alcaldes y gobernadores

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La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, ha impartido las siguientes instrucciones a los alcaldes y gobernadores:

  1. Realizar recorridos municipio por municipio con las comunidades para evaluar los puntos vulnerables, tomando como referencia los antecedentes de La Niña 2010-2011.
  2. Implementar jornadas de limpieza de caños, acueductos y rondas de los ríos de manera urgente.
  3. Establecer sistemas de alerta temprana con la participación activa de las comunidades, las autoridades ambientales y el sistema de gestión de riesgo.

Según la ministra, cada municipio y departamento cuenta con sus propios fondos de riesgos, y en los planes de desarrollo local se deberían incorporar recursos para la atención de emergencias. Además, el gobierno nacional está finalizando la consolidación de un plan técnico para la aprobación de una partida presupuestal destinada a la atención de desastres.

Situación actual de alertas por lluvias

La directora del Ideam, Ghislaine Echeverry, ha informado sobre el estado de las alertas por deslizamientos en el país. Actualmente, más de la mitad del territorio nacional se encuentra bajo algún nivel de amenaza.

Echeverry indicó que, debido a la continuidad de las lluvias en las últimas semanas, se ha registrado una sobresaturación del suelo, lo que ha llevado a que en promedio entre 800 y 600 municipios se encuentren en algún nivel de alerta por deslizamiento. De este total, 267 municipios están en alerta roja.

Además de las alertas por deslizamientos, el Ideam ha informado sobre la existencia de más de 150 puntos del territorio con alertas por inundaciones o crecientes súbitas. Asimismo, se han identificado 38 municipios con riesgo de incendios forestales.

Preparación del sector agrícola y pecuario

Uno de los sectores que se verá más afectado por la variabilidad climática proyectada es el agropecuario. Por ello, las ministras de Ambiente y Agricultura han hecho un llamado urgente a este sector para que se prepare adecuadamente.

  • En la zona de los Llanos Orientales, el sector deberá prepararse ante la posible disminución de lluvias.
  • En el Caribe y los Andes, se requerirán adecuaciones ante las posibles inundaciones.

La ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, ha enfatizado la importancia de que el sector agrícola y pecuario no baje la guardia y continúe avanzando en su preparación. Según sus palabras, «no podemos cambiar al clima, pero sí nos podemos adaptar a él».

Medidas de prevención prioritarias

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Foto: Alcaldía de Bogotá

Para hacer frente a esta situación climática sin precedentes, el gobierno ha establecido una serie de medidas de prevención prioritarias:

  1. Priorizar, a través del Sistema Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, las zonas que pueden sufrir inundaciones, movimientos en masa, avenidas torrenciales y otros eventos concatenados.
  2. Vigilar los puntos de emergencia identificados durante el fenómeno de La Niña 2010-2011 para reforzar las medidas de prevención.
  3. Fortalecer a los cuerpos operativos para que estén en capacidad de responder eficazmente en caso de eventos desastrosos.
  4. Establecer sistemas de alertas tempranas con la participación activa de las comunidades, frente a posibles inundaciones, avalanchas o movimientos en masa.
  5. Desarrollar jornadas de limpieza en ríos, quebradas y canales que puedan representar amenaza a la población, y evitar la acumulación de residuos sólidos.
  6. Realizar mantenimiento en desagües y canalización de aguas en vías principales y caminos veredales.
  7. Adelantar jornadas de limpieza en bocatomas, junto con las comunidades, para evitar afectaciones a los acueductos veredales y municipales.
  8. Evitar la acumulación de basuras en las viviendas rurales para prevenir inundaciones, manteniendo los depósitos de basura tapados.
Sara Gonzalez

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