¿Cuántas veces se necesitaría tener relaciones íntimas para preservar la buena salud?

Aunque no existe una respuesta única, hay muchos estudios que demuestran que tenerlas regularmente puede tener numerosos beneficios para la salud. En primer lugar, las relaciones íntimas pueden reducir el estrés y la ansiedad, lo que a su vez puede mejorar la salud mental. Además, pueden mejorar la salud cardiovascular, ya que aumentan la circulación sanguínea y reducen la presión arterial.

De hecho, un estudio realizado por la Universidad de Bristol en el Reino Unido encontró que las personas que tienen relaciones íntimas al menos una vez a la semana tienen un 50% menos de probabilidades de desarrollar enfermedades cardiovasculares que aquellos que las tienen con menos frecuencia.

Además, tener relaciones íntimas regularmente también puede mejorar la calidad del sueño, lo cual es fundamental para nuestro bienestar general. Durante el acto sexual, el cerebro libera una serie de hormonas que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad, lo que a su vez puede mejorar la calidad del sueño.

Puede interesarle: ¡Ten cuidado! Así actúa un manipulador cuando no consigue lo que quiere

Por otro lado, varios estudios han demostrado que las personas que las tienen con regularidad tienen un menor riesgo de enfermedades cardíacas, así como de diabetes y ciertos tipos de cáncer. De hecho, la actividad sexual regular puede reducir el riesgo de cáncer de próstata en los hombres.

Aunque la frecuencia óptima de las relaciones íntimas puede variar de persona a persona, la mayoría de los expertos coinciden en que tener relaciones íntimas de manera regular como parte de un estilo de vida saludable es importante para nuestra salud física y mental. Es importante comunicarse con la pareja sobre las preferencias y necesidades individuales, y tomar medidas para prevenir enfermedades de transmisión sexual.