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¿Cómo quitarle lo salado a la comida?

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Alguna vez te ha quedado la comida salada? Te gustaría saber cómo quitarle lo salado a la comida? Esto es algo que aunque nos ha ocurrido a todos, no deja de ser desesperante.

Cocinar puede considerarse un acto sencillo a simple vista, pero una vez que te adentras a este arte culinario, descubrirás la complejidad que esto implica.

Aunque a muchos les encanta el sabor salado, para otros puede ser un sabor bastante desagradable y difícil de tolerar. Antes de que te des por vencida (o) con la comida, debes saber que podría haber un remedio para componer los alimentos.

Añade papa cruda

El almidón presente en la papa absorbe la sal. Pela esta hortaliza, córtala en rodajas gruesas y añádela cruda para arreglar comida salada. Cuécelas durante unos 10 minutos y después retira con una cuchara las papas.

Agrega una pizca de azúcar

Pero no pongas demasiada o tu plato quedará dulce en exceso. Mejor agregarla poco a poco e ir probando para no pasarte con el dulzor.

Un trozo de pan

Añadir un trocito de pan cortado por la mitad es otra solución para arreglar comida salada. El pan, del mismo modo que lo hace la papa, absorberá la sal si lo dejas cocer durante unos minutos.

Maizena

Puedes diluir una cucharadita en un poco de agua y añadirlo a tu guiso. No te pases con la cantidad o el caldo te quedará demasiado espeso.

Enjuaga los alimentos

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Por último, puedes enjuagar las verduras o alimentos hervidos ligeramente y colocarlos en agua sin sal. Este es un truco para arreglar comida salada que mejorará su sabor y textura, pudiendo usarse sobre todo con las verduras cocidas, al vapor o asadas.

Hierbas aromáticas

En el caso de aliños o vinagretas pasados de sal, podemos probar a añadir algunas hierbas aromáticas o darle un toque más dulce con el añadido de miel y/o zumo de naranja.

Poner más cantidad de algunos ingredientes

Con platos de verduras, fideos, arroz, cereales o legumbres, lo que se puede hacer para compensar esa cantidad extra de sal es incorporarles más cantidad de estos ingredientes, aumentarás su volumen y estarán menos salados también.

También comprueba que el salero está bien cerrado, revisa la sal de esos productos procesados para no añadir más o solo la cantidad justa. Es preferible que pongas poco al principio y, al final una vez que esté cocinado, rectifiques y veas si tienes que poner un poquito más.

Incluso, puedes dejarlo algo soso y poner la sal en la mesa para que cada uno se eche lo que desee en su propio plato.

Existe más de una solución a una comida salada, solo tienes que poner en práctica estos sencillos consejos y los alimentos salados no serán un problema en tu cocina nunca más.

Fuente Revista MAG

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María Vargas Jimenez
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