Laura Sarabia entregó finalmente su versión del robo
Su caso se ha vuelto, hasta ahora, el escándalo gubernamental más grande del año
Aunque su comparecencia estaba prevista para este jueves 22 de junio, las declaraciones de Laura Sarabia ante la Fiscalía se dieron un día antes. En esta diligencia solicitada por el ente investigador, la exjefa de Gabinete de Gobierno entregó por primera vez su versión acerca del robo que ocurrió en su vivienda el 26 de enero, y por el cual nació el escándalo más grande que ha tenido el Estado en lo que va de año.
En su versión Sarabia contó que el monto que se perdió de su vivienda fue de aproximadamente 7 mil dólares en efectivo que había recibido por concepto de viáticos de una gira por Europa, los cuales usaría para pagar deudas bancarias, y que en esa bolsa también habían documentos importantes de lo que en ese momento era su trabajo dentro de la Presidencia de la República.
Esos documentos -dice la defensa- fueron el motivo por el cual se decidió someter al polígrafo perteneciente a la Casa de Nariño, a todo el esquema de seguridad de la exjefa de despacho, y también a su niñera, Marelbys Meza.
A finales de enero y principios de febrero, cuando se llevó a cabo dicho proceso, tanto Laura Sarabia como el resto de los involucrados pensaron que todo había quedado ahí, pero la sorpresa se la llevaron cuando Meza se decidió a hablar del tema en entrevista con la revista Semana.
Todo lo que vino después para Laura Sarabia
Meza dijo que se sintió vulnerada y hasta «secuestrada» cuando la llegaron a una dependencia del Gobierno para que pasara por el polígrafo, y esas declaraciones causaron un ‘huracán’ dentro del Gobierno, al punto de que ‘rodaron las cabezas’ de dos altos funcionarios: la de Sarabia, y la de Armando Benedetti, quien para la fecha era embajador de Colombia en Venezuela.
Benedetti entró en la jugada porque se le señaló de haber generado el inició del escándalo en venganza de Sarabia, pues al parecer esta se le había «volteado», teniendo en cuenta que fue su empleada por al menos seis año, y ahora -presuntamente- no lo estaba ayudando a recibir la atención que él creía que merecía de parte de la Presidencia.
El su¡c¡di0 del coronel Dávila
El caso empeoró aún más cuando la Fiscalía anunció públicamente que en este suceso Laura Sarabia había promovido interceptaciones ilegales a los teléfonos de Marelbys Meza y otra de sus empleadas domésticas, y que lo hizo con la ayuda de un informe falso de la Policía Judicial.
Después de eso varios oficiales de la Fuerza Pública se vieron involucrados en el caso y fueron llamados a declaración. Pero para uno de ellos (por razones aún no precisas), la presión fue mucho más fuerte y en menos de un mes decidió quitarse la vida. Hablamos del teniente coronel Óscar Dávila, quien se disparó en la cabeza el pasado 9 de junio.
Él mismo presidente de la República, Gustavo Petro, confirmó que Dávila no supo batallar con las presiones a las que estaba siendo sometido, las cuales él dice haber subestimado.
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