¿Te falta alguna? Vacunas que toda persona debe tener
La vacunación es una responsabilidad individual y colectiva para prevenir la propagación de enfermedades
La vacunación es una de las medidas más efectivas para prevenir enfermedades infecciosas. A continuación, se presentan algunas de las vacunas que toda persona debe tener:
Influenza
La vacuna contra la influenza es recomendada anualmente para todas las personas mayores de 6 meses. Esta vacuna protege contra la gripe, una enfermedad respiratoria contagiosa que puede ser grave e incluso mortal en algunos casos.
La vacuna protege contra los virus de la influenza que se espera que circulen durante la temporada de influenza. Está disponible todos los años. Es especialmente importante para personas que corren un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves a causa de la influenza. Esto incluye a niños pequeños, mujeres embarazadas, personas mayores y personas con enfermedades crónicas.
Algunas personas pueden tener dudas sobre la seguridad de la vacuna contra la influenza. Sin embargo, esta ha sido ampliamente estudiada y se ha demostrado que es segura. Los efectos secundarios son generalmente leves y desaparecen en pocos días.
Tétanos y la difteria
La vacuna contra el tétanos y la difteria se administra a través de una inyección y es recomendada para todas las personas. La vacuna protege contra dos enfermedades graves que pueden ser mortales si no se tratan adecuadamente.
Hepatitis B
La hepatitis B es una enfermedad viral que afecta el hígado. Esta vacuna se recomienda para todas las personas, especialmente aquellas que tienen un mayor riesgo de contraer la enfermedad, como los trabajadores de la salud y las personas que tienen múltiples parejas sexuales. Es importante conocer los síntomas para poder detectarla temprano y recibir tratamiento adecuado.
Síntomas tempranos
Los síntomas tempranos de la hepatitis B pueden ser similares a los de una gripe común. Estos incluyen:
- Fatiga
- Dolor de cabeza
- Fiebre
- Dolor muscular y articular
- Pérdida del apetito
- Náuseas y vómitos
- Dolor abdominal
Síntomas avanzados
Si la hepatitis B no se trata, puede progresar a una enfermedad crónica del hígado. Los síntomas avanzados pueden incluir:
- Orina oscura
- Heces pálidas
- Ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos)
- Dolor abdominal severo
- Hinchazón de la barriga
- Hemorragias nasales y de las encías
- Confusión y problemas de memoria
Sarampión, las paperas y la rubéola
La vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubéola se administra en dos dosis y es recomendada para todas las personas. Estas enfermedades son altamente contagiosas y pueden ser graves, especialmente en los niños.
Varicela
La vacuna contra la varicela se administra en dos dosis y es recomendada para todas las personas que no han tenido la enfermedad o que no han sido vacunadas anteriormente. Es una enfermedad viral que causa una erupción cutánea y puede ser grave en algunos casos.
Síntomas
Los síntomas de la varicela pueden variar de persona a persona, pero por lo general, los síntomas incluyen:
- Fiebre
- Dolor de cabeza
- Pérdida de apetito
- Malestar general
- Erupción cutánea
La erupción cutánea es el síntoma más distintivo de la varicela. Las ampollas suelen aparecer en la cara, el torso, los brazos y las piernas. Las ampollas pueden picar y causar molestias.
¿Cómo tratarla?
Aunque no existe una cura para la varicela, existen medidas que se pueden tomar para aliviar los síntomas y prevenir la propagación del virus.
- Mantenerse hidratado: Es importante beber suficiente agua para prevenir la deshidratación, especialmente si se tiene fiebre.
- Tomar baños de avena: Los baños de avena pueden ayudar a aliviar la picazón y la irritación causada por las ampollas.
- Usar ropa suelta: La ropa apretada puede irritar la piel y empeorar la picazón. Es mejor usar ropa cómoda.
- Tomar medicamentos para la fiebre: Si se tiene fiebre, se pueden tomar medicamentos como el acetaminofén o el ibuprofeno para reducir la temperatura corporal.
- Evitar el contacto cercano con otras personas: La varicela es altamente contagiosa, por lo que es importante evitar el contacto hasta que las ampollas hayan desaparecido por completo.
Es importante recordar que la vacunación es una responsabilidad individual y colectiva para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas. Por lo tanto, es recomendable consultar con un médico para conocer las vacunas necesarias según la edad, el historial médico y otros factores de cada persona.
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