Cuida tu estómago: conoce lo que NO debes hacer
Muchas son las cosas que pueden causarte un daño estomacal
Todos los órganos del cuerpo son de vital importancia, pero si hablamos de aquellos que cumplen muchas funciones que implican otros órganos, hay que mencionar al estómago, ya que este se encarga de recibir los alimentos y enviarlos al aparato digestivo para luego deponerlo o expulsarlos.
Muchas son las cosas que pueden causarte un daño estomacal, como por ejemplo la ingesta rápida de alimentos, el alcohol y cafeína, la ingesta desmesurada de alimentos grasos, e incluso algunos factores involuntarios como los ataques de ansiedad, el estrés y las emociones.
El estómago contiene microbiotas
Como ocurre con el resto de las partes del cuerpo, cuidar el estómago y mantenerlo sano depende de uno mismo. En él se encuentra la denominada microbiota o microflora, conjunto de microorganismos vivos o bacterias que se encuentran en el intestino o tubo digestivo del organismo humano.
La existencia de estas bacterias intestinales es muy beneficiosa para el desarrollo del sistema inmune, así como para la conducta humana y el estado de ánimo. De hecho, las bacterias de nuestro intestino no son malas, ya que el desarrollo del sistema inmune depende de ellas.
Lo que no debes hacer
En este caso, la alimentación juega un papel fundamental, pues de ella depende que el estómago no se dañe. Como dijimos anteriormente, las bebidas con cafeína y/o alcohol son extremadamente negativas cuando se consumen en exceso, por lo que podrías sustituirlas por jugos de frutas con endulzantes sanos.
Disminuye el nivel de aceite que utilizas en tu cocina. Las frituras no son beneficiosas y hoy es posible lograrla sin una pizca de aceite, como con la freidora de aire, por ejemplo, o preparando platillos en el horno convencional.
No te olvides de la fibra
La fibra es supremamente necesaria para el cuerpo, se puede encontrar en la yuca, en la papa, el brócoli, los espárragos, la remolacha, las zanahorias, las espinacas, la calabaza, champiñones, espárragos, las alcachofas, la lechuga, la acelga, entre otros.
PERO OJO, cuidar del estómago no se logra solo con alimentación, también debes preocuparte por aspectos como aprender a manejar el estrés, evitar los ataques de ira controlando la respiración, y sobre todo respectar el correcto ciclo del sueño que no debe ser menor a las ocho horas diarias.
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