Joven exiliado en Alemania perdió la vida en extrañas circunstancias
"¡Te quitás esa camiseta o te ‘pelamos’! O aprende, o aprende. Vamos a coger todas estas porquerías y las vamos a sacar del país"
Durante las protestas de 2019, se hizo viral un video en el que se podía observar a varias personas atacando verbalmente a un joven en Medellín. El hecho se registró el 20 de enero de ese año y se trató de Alan Garzón Ramírez, un joven de 17 años que decidió ir al parque de San Antonio a manifestarse en contra de «la guerra de Duque-Uribe», como se podía leer en la camiseta que tenía puesta.
Allí se cruzó con un grupo de personas, que marchaban en contra del atentado del ELN a la Escuela General Santander de la Policía, quienes rechazaron la protesta de Alan y decidieron sacarlo de la manifestación.
El video que se hizo viral en su momento muestra a un hombre de avanzada edad vistiendo una camiseta de la selección Colombia que le gritaba: «¡Te quitás esa camiseta o te ‘pelamos’! O aprende, o aprende. Vamos a coger todas estas porquerías y las vamos a sacar del país».
"Pa'que sepas, te quitás esa camiseta o te pelamos, y tenemos la ayuda del presiente Duque".
Sin palabras…
#UribeEsElCáncerDeColombia#TeQuitásEsaCamisetaOTePelamos#NoMasUribe pic.twitter.com/W72C8gxsKC
— Maria Niny Echeverry (@Marianiniecheve) January 20, 2019
Luego de ese incidente, la vida de Alan cambió por completo, debido a que empezó a recibir amenazas de muerte. De acuerdo con un allegado del joven, los mensajes de odio anónimos eran enviados a sus redes sociales y hasta su casa, en el barrio Buenos Aires. Sin embargo, las autoridades no le brindaron protección, por lo que tomó la decisión de exiliarse en Alemania.
Allá se estableció en el vecindario de Vinnhorst, de la ciudad de Hannover, y consiguió trabajo en un restaurante mientras estudiaba para ser Chef. Asimismo, logró comprobar que corría peligro en su país y por ello obtuvo asilo político. «Allá lo ayudaron con el asilo, aprendió alemán e inglés en un año, era increíble lo inteligente que era él», dijo un familiar del joven.
Sin embargo, en octubre la familia de Alan dejó de comunicarse con él. Fue una amiga de el joven quien les dijo sobre su desaparición y posteriormente sobre el hallazgo de su cuerpo sin vida.
Unos recolectores de hongos lo encontraron en el bosque de Mecklenheide, en Hannover. De acuerdo con la prensa local, Alan Garzón Ramírez fue visto por última vez por sus amigos durante la noche del 23 de septiembre al norte de la ciudad.
Aunque las autoridades forenses alemanas cerraron el caso por «ausencia de factores externos que pudieran haber contribuido al deceso», una expresión que se usa cuando se trata de un posible suicidio, “Ella (su amiga) dice que él le demostró que estaba bien anímicamente. Pero, cuando fue a declarar a la Policía y pidió que revisaran las cámaras del Metro, no ‘le pararon bolas’”, dijo otra familiar del joven.
«Todavía no creemos que se haya quitado la vida porque él era muy alegre, y tenía muchas ganas de irse para ayudarnos y para salir adelante. Él tuvo que irse a buscar un futuro y vea lo que se encontró», concluyeron los familiares de la víctima.
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