El expresidente del Senado, Iván Name Vásquez, compareció ante la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia como parte de la investigación por presunto cohecho impropio y peculado por apropiación a favor de terceros, vinculada al escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Según las declaraciones de Sneyder Pinilla, exsubdirector de la entidad, Name habría recibido 3.000 millones de pesos en sobornos, presuntamente entregados por Sandra Ortiz, exconsejera presidencial para las Regiones, a cambio de apoyar reformas en el Congreso.
También declararon en calidad de testigos María Clara Name, hija y concejal; y Gabriel Alberto Calle y Gabriel Calle Aguas, familiares del representante Andrés Calle, señalados por Pinilla de recibir parte de los recursos que habrían sido destinados a campañas políticas.
Reiteró su inocencia
A su salida de la Corte, Name reiteró su inocencia y su fe en la justicia. “He sido calumniado e injuriado, pero no derrotado. Creo firmemente en la justicia colombiana y en la Corte Suprema”, afirmó. Además, señaló sentirse «crucificado», pero esperanzado en que «después de la crucifixión viene la resurrección».
El senador evitó profundizar en detalles por respeto al proceso, pero cuestionó las acusaciones, calificando a los denunciantes como integrantes de una “banda criminal”. Aseguró que su comparecencia no se dio por ser perseguido por la justicia, sino por buscarla para esclarecer los hechos.